On-premises: el modelo de software basado en el servidor
Los fabricantes de software apuestan cada vez más por el modelo de computación en la nube Software as a Service o “Saas”. Uno de los ejemplos más conocidos es el paquete de Microsoft Office, para cuya utilización se abona una cuota de licencia de manera regular. Pero, hasta el año 2010, el modelo de licenciamiento más extendido, tanto para el paquete Office de Microsoft como entre otros proveedores de software, era el modelo on-premises. El termino on-premises se refiere al hecho que los titulares de la licencia instalan el software en su propio entorno informático, sin recurrir a la nube o necesitar acceso a internet. Aquí te explicamos qué significa on-premises exactamente, que ventajas e inconvenientes conlleva este modelo para software basado en el servidor y en qué sectores sigue teniendo una gran relevancia.
¿Qué es un software on-premises?
“On-premises” significa en español “en las instalaciones propias” o “in situ”. Esta definición de on-premises se refiere a la utilización de servidores y entorno informático propios de la empresa. Cuando se recurre a este modelo de utilización, el cliente alquila, en calidad de titular de la licencia, un software basado en servidor que se instala en un servidor propio o alquilado. Puesto que el titular de la licencia opera el software en su propio centro de datos y en hardware propio o alquilado, también se denomina “inhouse”.
Al contrario que en la computación en la nube, los clientes de on-premises obtienen todo el control de los datos y también asumen todos los riesgos bajo su responsabilidad. La utilización del hardware del proveedor queda excluida en los servicios on-premises. Esto diferencia claramente este modelo de las opciones de computación en la nube.
On-premises: abreviado on-prem, denomina un modelo de licencia y de uso del software basado en el servidor o programas de ordenador que el cliente o el titular de la licencia instala en su propio entorno informático.
No obstante, los titulares de la licencia no solo asumen responsabilidad hacia los riesgos, sino también todos los costes que se generan a partir de la utilización del software. Entre ellos se suelen encontrar las tasas de mantenimiento y los costes de funcionamiento de hardware y software. En el caso de un software de código abierto, una comunidad muy implicada suele hacerse cargo del desarrollo y la corrección de errores. El inconveniente es que, en este caso, se suprime el derecho de garantía. Si es necesario, es posible adquirir el servicio técnico requerido o las actualizaciones de software a través de los proveedores correspondientes.
Los titulares de las licencias obtienen el acceso al software mediante una aplicación de escritorio o una interfaz de usuario basada en la web. Las empresas que trabajan con datos confidenciales se suelen decidir por aplicaciones basadas en escritorio para evitar los posibles fallos de seguridad y el acceso no autorizado al sistema.
Relevancia de on-premises
La relevancia de on-premises no ha dejado de disminuir desde 2010, puesto que el modelo de software se ve cada vez más desplazado por el más novedoso modelo de computación en la nube Software as a Service (SaaS). En el caso de este modelo, el titular de la licencia abona una cuota de utilización que, además del software, cubre el funcionamiento y el mantenimiento del mismo. A diferencia del modelo de software on-premises, la licencia de utilización no se adquiere en una transacción única, sino que se debe renovar por medio de un pago regular. El proveedor pone a disposición del cliente el total de los recursos de hardware y software.
Hasta la aparición de la computación en la nube, la utilización local de software era la norma general. La denominación “on-premises” surgió en realidad a raíz de la consolidación del software en la nube, para así diferenciar el que hasta entonces era el modelo habitual instalado en servidores y entorno informático propios. Además de la ubicación del hardware, existen más diferencias entre el software on-premises y el software en la nube.
Ventajas e inconvenientes del modelo on-premises
Antes del cambio al modelo de computación en la nube, entre la oferta consolidada de servicios on-premises se encontraban conocidos ejemplos como el paquete de Microsoft Office, la suite Adobe Creative o SAP. Hoy en día, el modelo de software basado en el servidor sigue suponiendo la mejor opción para muchas empresas frente al más moderno SaaS. El motivo principal es la marcada seguridad de los datos y el control total sobre datos y accesos.
Otra de las ventajas más aprovechadas respecto a las alternativas basadas en la nube es la posibilidad de la adaptación individual del software. El software estándar constituye el elemento central y la base para su ampliación o adaptación individual a las necesidades especiales del cliente y sus campos de aplicación. No obstante, este servicio también implica unos costes considerables para la adaptación o el aumento de precio de los derechos de licencia. Además, las posteriores actualizaciones que se deban realizar requieren un mayor esfuerzo y son más costosas que en el caso del software estándar.
El modelo on-premises presenta además varias ventajas e inconvenientes:
Ventajas de on-premises
- Control: el titular de la licencia obtiene el control absoluto sobre todos los datos y decide qué personas tienen acceso a ellos. La utilización de recursos internos y el funcionamiento del software es también responsabilidad del cliente.
- Protección de datos: con el modelo de software on-premises, el titular de la licencia conserva todos sus datos en su propio centro de datos, por lo que no se permite el acceso a terceros. El cumplimiento de las disposiciones legales en torno a la protección de datos es más sencillo, puesto que los servidores en la nube suelen estar en países con otras directivas de protección de datos.
- Costes únicos: con on-premises, el titular de la licencia abona un precio único por la compra y la utilización ilimitada del software. No obstante, los costes de inversión son correspondientemente más elevados que en los modelos de suscripción.
- Independencia: el titular de la licencia no depende de terceros proveedores ni del proveedor de la licencia. El acceso a los datos está siempre garantizado, incluso sin acceso a internet.
- Integración: el software basado en licencia se puede integrar con mayor profundidad en la infraestructura propia y vincular con otros programas.
Inconvenientes de on-premises
- Hardware: el titular de la licencia necesita el hardware correspondiente compatible con el software. El mantenimiento regular también es responsabilidad del cliente.
- Esfuerzo: el titular de la licencia debe instalar y ejecutar las actualizaciones y copias de seguridad para garantizar la seguridad y solucionar problemas. Esto no solo conlleva tiempo, sino que también requiere los conocimientos necesarios por parte de la empresa y sus empleados.
- Costes de licenciamiento: en muchos casos, la licencia está limitada a un determinado número de puestos de trabajo. En empresas con muchos trabajadores, esto puede generar unos costes muy elevados.
- Costes de funcionamiento: sobre todo en el caso del software individualizado, constantemente se generan unos costes elevados destinados a la adaptación del software y sus actualizaciones, así como a subsanar errores.
- Falta de asistencia técnica: en la mayoría de los casos, el fabricante interrumpe en algún momento el desarrollo posterior del software. Esto también conlleva la expiración del servicio técnico.
- Recursos: aunque el titular de la licencia cuenta con el control absoluto sobre la utilización del software, esto también requiere de sus propios recursos.
La nube empresarial de IONOS es una infraestructura en la nube segura y flexible y una alternativa a los servicios on-premises para empresas.
¿Dónde se utiliza on-premises?
Aunque la relevancia de la computación en la nube no deja de crecer, los servicios on-premises siguen siendo la mejor opción para muchas empresas y organizaciones. En sectores como el financiero y el sanitario, las empresas están sujetas a normativas de protección de datos muy estrictas. Un modelo de software on-premises permite proteger mucho mejor los datos sensibles frente al acceso de terceros gracias a la gestión interna de datos y procesos de la empresa. Cada empresa define por sí misma cuántas y qué personas tienen acceso a los datos.
Las empresas que trabajan con datos sensibles no tienen necesariamente que renunciar a las soluciones en la nube por motivos de seguridad. El formato de la nube híbrida permite disfrutar de las ventajas de ambos mundos.